Las quebradas e inclinadas callejas que se descuelgan del cerro nos sumergen en un paseo jalonado de notables casas blasonadas de los siglos XVI y XVII. En la parte baja del pueblo se asienta la iglesia de San Pedro, una obra gótica del s. XIII ideada en la misma época que el templo de San Saturnino con el fin de acoger a los fieles de lo que entonces eran los arrabales.
En un extremo de la calle Barredinda, frente a la casa del Sorchante, se sitúa este noble caserón, armado con grandes rejas de hierro en planta baja y larga balconada en el piso. Se le conoce por el apellido de la hacendada familia falcesina que la poseyó, los Badarán. Palacio del siglo XVIII, con buena fachada de sillería estructurada en dos altos cuerpos y ático de excelentes proporciones, que articulan pilastras de escaso relieve. Tiene cinco calles de vanos adintelados, portada en un extremo encuadrada por pilastras, rica forja en las ventanas y en el balcón corrido del segundo piso y doble alero de madera con ménsulas talladas que culmina el conjunto, auténtico ornato de esta fachada de austeridad herreriana.
En el centro se localiza un pequeñoñ escudo cuartelado sobre cruz de Calatrava. Edificio más suntuoso y austero a la vez de la villa.
Además se pueden visitar las casas Arellano, Arrasate....