Basílica de la Virgen de Jerusalén

Basílica Virgen de Jerusalén.

A la salida del pueblo, por la carretera que dirige a Pamplona, se levanta la basílica de Nuestra Señora de Jerusalén, en el que se conserva una talla románica, talla de la Virgen, Patrona del caserío, en cobre esmaltado que, según cuenta la leyenda, la trajo un artajonés de las cruzadas de Tierra Santa.
Edificio o es construido entre 1709 y 1714 sobre un emplazamiento de otra románica levantada en la segunda mitad del siglo XII y a la que habría precedido otro templo en épocas anteriores.
El templo es de planta de cruz latina, con cúpula sobre el crucero.
La imagen mide 319 mm. La Virgen sedente y el Niño llevan coronas flordelisadas, muy francesas, decoradas con bolitas de esmalte.